Poco nos fijamos que la miseria (aparte de la moral) también existe, y que entre tanto bla, bla, bla... se está sembrando un verdadero drama social que ya empieza a verse por nuestras calles. Eso sí, algunos sólo la verán, para llamar a la policía para que desalojen a los molestos mendigos de la vía pública.
Quizás sea conveniente espabilarnos y concienciarnos de que ahora a los barrios no se les debería dotar de piscinas municipales (por ejemplo), si no que al paso que llevamos, se debería establecer alguna red de asistencia PÚBLICA más eficiente (no caridad), que palié las necesidades presentes y futuras de tanto desastre. ¡¡Que vuelva el Estado, que nos ha abandonado!!
2 comentarios:
Me uno a tu grito: ¡Que vuelva el Estado, el derecho, que no dejen el espacio yerto en manos de la caridad!
A very moving image. Yet, very important one.
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