¿Cuántas veces deshojamos la margarita al tomar una decisión en nuestra vida personal, profesional y en la de cada día y al final sólo pretendíamos quedarnos como estábamos? Sin duda las circunstancias de nuestro entorno, tienen demasiado protagonismo. Quizás, esta tremenda crisis nos haga pensar, que hay otros valores, que hay cosas más importantes que con el dinero, con la ambición no se conquistan. En estos momentos, más que nunca, florece la amistad, la solidaridad y el ingenio. -Si lo que queremos es ser felices ¿por qué dejamos que nos compliquen nuestra existencia? y ¿por qué jugamos a este juego caprichoso de adolescentes del todo y del nada?
2 comentarios:
Buenas preguntas. ¡Qué saludable resulta cuestionarse las cosas!
Saludos
excellent !
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