La fuente del pedestal de la Glorieta no ha tenido la suerte de ser reinagurada con la escultura del niño con tortuga que es la que existía en este lugar. Le ha tocado estrenarse pobremente con un chorro hongo que por efecto óptico y no alucinógeno puede producir esta imagen de Sagasta apareciendo de ella. ¿Quizás, debamos esperar otras citas electorales para este retorno?
2 comentarios:
Muchos van a los mismos sitios pero son pocos los que ven las mismas cosas que tú.
saluxos y buen blog
Gracias, anónimo.
Publicar un comentario